La idea de incorporar un taller de teatro llega después de la función navideña realizada cada año. En estas fechas nos dimos cuenta de cómo los residentes disfrutaban con esta actividad y llegamos a la conclusión de que podíamos realizar este taller semanalmente y así beneficiarnos de todo lo que nos aporta: mejora de autoestima, control corporal, creatividad, escucha activa, pertenencia al grupo, estado de ánimo, evitar la pasividad…